11. La participación escolar

Como futura docente me gustar imaginar que mis alumnos van a estar atentos, activos y motivados en el aula, participando impetuosamente y haciendo preguntas y respondiendo a las mías. Pero mucho me temo que conseguir esta realidad es algo idílico y, desde luego, muy complejo.

Gran parte de los alumnos que tendremos frente a nosotros en clase desconectarán durante nuestra lección o aunque intenten seguir la explicación no lo lograrán. A estos se suman los que directamente no quieren atender ni participar (ni siquiera asistir) y aquellos que no participan por timidez, miedo a la burla y a hacer el ridículo. 

Nuestra labor como docentes es tratar de promover la participación de todos nuestros alumnos a pesar de las dificultades mencionadas. Lo más importante es conseguir que el alumno se sienta involucrado en el proceso educativo. 

Se puede decir que la participación escolar se fundamenta sobre 4 pilares, o sobre 4 factores:

1. El aprendizaje personalizado: consiste en identificar los puntos fuertes y débiles de cada alumno para poder aplicar un método adecuado, no vale el mismo para todos. 
2. El aprendizaje sin límites: el interés por aprender puede abarcar diferentes momentos del día, no solo las horas lectivas, y diferentes espacios, no solo el aula o el centro educativo.
3. El aprendizaje dirigido y controlado por el estudiante: el alumno debe tener un cierto grado de autonomía que le permitirá hacerse responsable de su propio éxito o fracaso. La participación se dará en mayor o menor medida en función del fomento de sus intereses e inquietudes.
4. El aprendizaje basado en competencias: el alumno tiene que saber qué es lo que va a aprender y para qué le va a servir en su vida, en su día a día. Si no nunca tendrá el suficiente interés ni prestará la atención necesaria.

Como música, musicóloga y futura profesora de música se me ocurren actividades en este campo que pueden despertar la motivación de los alumnos y hacer que aprendan y participen en las clases. 

• Programar excursiones a museos con exposiciones sobre música o relacionadas. En el Museo de la Ciencia han organizado diferentes exposiciones de este tema. Por ejemplo se me ocurre la de "Arqueomúsica: así sonaba la Europa antigua". Posteriormente se pediría a los estudiantes escribir sobre lo que más les ha llamado la atención y comentarlo en clase delante de sus compañeros.
• Otra posibilidad sería ir al Auditorio Miguel Delibes, también Conservatorio de música y danza, a un concierto interactivo o una exhibición. Después pueden hacer preguntas a los músicos y bailarines sobre aquello que haya despertado su curiosidad.
• Relacionado con lo anterior, llevar a los alumnos a un musical o concierto, puede ser desde compañías menos conocidas hasta grandes producciones como El Rey León o Anastasia (soñemos a lo grande). Tras la actuación programar un tiempo para preguntas y dudas a los intérpretes. 

¿Y a vosotros/as, qué propuestas se os ocurren para promover la participación escolar? ¡Os leo!